PADRE NUESTRO QUE ESTÁS EN LOS CIELOS.




Sé muy bien
que tú
antes de devorarla
digieres mentalmente a tu presa.
Que dentro de ti prefieres matar dos veces
por si fuera necesario.
Pero tengo la esperanza que dejarás de prever.
De dimensionar previamente.
Que no serás ni fiel ni infiel.
Que no adorarás a ningún Dios.
Ni calmarás tu locura con extrañas ceremonias.
Que no harás ritos imposibles para mantener la esperanza,
por si acaso no existiera la nada.

Comentarios

Entradas populares de este blog

CANCIÓN SIN MÚSICA.

TOCAYO.

POR UNOS INSTANTES EN MIS SUEÑOS.