NE ME QUITTE PAS.
...a mi no me gusta jugar a que estamos escondidos, pretendo reconocerte,
en lo más ínfimo que ocupa su espacio, llegar a ti a escondidas es una apariencia,
no un resultado definitivo.
Si eres cobijo, pretendo que me tapes. Si lo que ocurre es que das sombra, que me quites el dolor de lo que me quema.
Abiertamente ya sabes que cojo en tu pecho, y que puedo temblar si no escondes tu mano.
Cuando todo se quede quieto, déjame que me recoja dentro de ti. Nada de ti me sobra. Nada de ti es ingrato. Tú cuerpo es un alimento íntegro, nada de ti me da preocupación ni asco. Sólo estando contigo me acojo al sentido de la existencia.
Te pido permiso para que me quieras, yo te concedo un amplio margen, mis posesiones olvidadas: sentir ausencia mientras estoy boca arriba, tener miedo, pensar que he de morirme entre el más absoluto desprecio de los olvidados.
Necesito que estés dispuesta a defender lo más nimio, que no nos separe ni el bien ni el mal, que te vengas conmigo a jugar juntos con la imaginación.
Debo beber de tus espaldas, lo más íntimo, lo que ya no necesites.
Si respiras conmigo déjame contar el tiempo que me queda.
Pedir permiso para encontrarnos no es obligatorio.
Donde ocupamos podrá haber flores. Cerrar los ojos para soñar será una obligación.
La levedad de una caricia queda reconocida para siempre después de un instante diminuto.
Nunca poses en vano tu mano sobre mi.
Ne me quitte pas.
Comentarios
Una rotunda frase para el final de un gran poema de amor.
Saludos.
Paula
saludos