TU LLAVE.

¿Crees que merece la pena llorar para demostrar todo tu dolor? Esta es tu llave: AAAAB3NzaC1yc2EAAAADAQABAAABAQDEZKI3CLC2at0GlgY6cG6 Te la doy en ese orden, letras grandes y pequeñas. Cambiala obsesivamente por si el peligro te acecha, ponla al revés, escríbela en la página 33 de un libro de 2000 páginas que no dice nada, dímela entre todo el silencio varias veces para que la recuerdes. Que nadie te conozca es el objetivo sólo ese espacio que abres, y la puerta al cerrarse detrás de ti.