NO PUEDO DECIRTE MÁS.
Para estar totalmente tranquilo hubiera necesitado un bolsillo más.
Para esconder lo más intimo, un bolsillo bajo la piel.
Y luego dejarme llevar, sobrevivir sobre una parte hecha de sal, una de aire, una de tierra, una de fuego, y permanecer sobre todo lo que se mueve, dando ligeramente amor, haciendo sufrir lo menos posible.
Entretenerme colocando piedras en grupos de cuatro, alguna vez, otras veces en grupos de cinco, otra vez en grupos de seis de distintos colores.
Y esperar a que venga el sol, venir en el sentido de que será grandioso, hasta morirme por exceso de luz.
Ahora es el momento de coger puñados de arena y soñar. Tener el miedo necesario, ser cobardes lo imprescindible, amar con precaución y mejor no sufrir.
Alguna vez he podido tocarte en sueños, levemente.
Existes para mi cuando todo está oscuro, como el inicio de algo vivo.
No puedo decirte más.
Comentarios
estas letras merecen inclinación de cabeza ante cabeza reverenciada
beso
Siempre hay literatura amable, por estos lares, más que lo publicado en papel.
Un orgullo leerte.
Irama. Burgos.
Anónima Irama, extraño nombre, es grato que me hayas encontrado.
Me la copio y pego.
;)
Besos querido